Comentarios sobre una resolución judicial de la Audiencia Provincial de Barcelona

Según diversos medios de comunicación la Audiencia Provincial de Barcelona ha estimado un recurso contra la inadmisión de querella por el Juzgado de Instrucción nº 28 de dicha ciudad, relacionada con los bombardeos de la aviación italiana durante nuestra guerra civil.

 Creo que noticias de este tipo deben ser comentadas, acogiéndose al derecho de libertad de expresión, con una buena dosis de ironía, porque si no el exceso de garantismo de nuestras leyes, podría resultar irritante.

 No cabe duda que España es un dechado de virtudes y en consecuencia prácticamente no tenemos problemas y si hay alguno en determinados ámbitos, desde luego no en la Justicia.

 Todos sabemos que funciona a la perfección, sin demoras, con resoluciones tan justas y apreciadas, que casi no produce apelaciones, ni siquiera discusiones discrepantes.

 Por eso, los Juzgados y Tribunales están tan desahogados que pueden ocuparse intensamente de cualquier asunto actual, sin desdeñar los pasados, aunque hayan transcurrido 75 años, o más.

 Y hay que aplaudir la decisión de la Audiencia, porque además, los querellados tienen antecedentes de similares ”hechos reales sobre cuya certeza no cabe la menor duda”, y “al haber sido investigados y contrastados por numerosos historiadores de distintas nacionalidades, cuyo prestigio está fuera de dudas” según el tenor literal de dicha resolución.

 Como es fácil suponer, nos estamos refiriendo a los crueles asedios y genocidio que hicieron en Numancia y que no es posible que lo olvidemos.

 Pero, aunque no es exactamente igual, acordémonos del exquisito juicio de Jesús el Nazareno, su suplicio y crucifixión y que “el romano imperialista, puñetero y desalmado que lavándose las manos quiso borrar el error”, según una canción de hace algunos años.

 En definitiva, nuestro aplauso por dicha decisión y que el Juzgado de Instrucción nº 28 de Barcelona y, en su caso, la Audiencia Provincial trabajen con ahínco dado que tienen tiempo de sobra.

 Alfonso Cañizares Alex

Abogado