Claves sobre los derechos de autor

Guía publicada por:

Lexdir

El autor de una obra es el titular de los derechos de propiedad intelectual desde su creación. No es necesario registrarla para que el autor pueda disfrutar de los derechos sobre su obra, aunque es recomendable hacerlo para evitar en un futuro problemas para demostrar la autoría de la obra. Como regla general, la ley prevé que sólo las personas físicas pueden ser titulares de los derechos de autor, excluyendo de esta manera a las empresas, aunque si el autor desarrolla su obra utilizando los medios de la empresa y durante su jornada laboral, se considera que pertenecen a la empresa. En este tipo de casos, lo más común es que se determine a quién pertenecen los derechos en una cláusula del contrato de trabajo.

Antes de que otra persona pueda utilizar una obra protegida hay que pedir la autorización al titular de los derecho de autor. Si el autor concede los permisos necesarios para utilizar la obra (ya sea para reproducirla, comercializarla, modificarla o incluso traducirla), no habrá ningún problema legal. Es probable que el autor pida una compensación económica para ceder sus permisos, cantidad que debe estar fijada en el documento de la licencia o cesión de los derechos de autor.


Los derechos de autor protegen las creaciones artísticas durante la vida del autor y hasta 70 años después de su muerte

El autor de creaciones literarias, artísticas, teatrales, científicas o audiovisuales disponen de un derecho sobre sus obras que permite decidir cómo explotarlas, reproducirlas, cederlas, protegerlas, así como el método de distribución, transformación o colección. De esta manera, el autor puede determinar cómo proteger sus obras y emprender acciones legales contra aquellas personas que no respeten su obra o la voluntad de explotarla.

Los derechos de autor tienen una limitación temporal, dependiendo de la obra y los permisos que han sido concedidos para su explotación. Como norma general, duran toda la vida del autor y hasta 70 años después de su muerte, periodo durante el que los herederos de los derechos gestionarán de la manera que crean conveniente. Una vez finalizado este plazo, las obras ya no quedan protegidas y pueden ser comercializadas libremente.

Los derechos de autor le reconocen el derecho de paternidad sobre la obra es decir, que se especifique correctamente el nombre del autor en la obra creada. De la misma manera, se le reconoce el derecho a mantener su integridad, esto es, que no se modifique la obra en ningún punto. Del mismo modo, la ley protege el buen nombre y la reputación del autor.


¿Qué protege la propiedad intelectual?

Los derechos de autor protegen tanto las creaciones originales como las derivadas:

  • Creaciones originales: Obra literaria, artística o científica de cualquier tipo, ya tengan soporte físico o digital. Es decir, quedan protegidos los libros, composiciones musicales, canciones, obras cinematográficas, esculturas, cuadros y programas de ordenador.

  • Obras derivadas: Se trata de las adaptaciones o transformaciones de obras que ya existen, como por ejemplo, las traducciones, las adaptaciones o los arreglos musicales.


Se excluyen de la protección de los derechos de autor a las bases de datos.