La firma electrónica

La seguridad en la red es una de las cuestiones que mayor preocupación suscitan a los internautas. Para evitar intromisiones ilegítimas en la intimidad como podría ser en cuentas de correo, en las cuentas bancarias, etc., se han creado dos novedosos mecanismos: la firma electrónica y los certificados digitales.

La firma, como mecanismo de seguridad, está prevista para proteger aquellas operaciones de máximo riesgo como por ejemplo, todas las operaciones bancarias, el pago de facturas por internet, etc.

La firma electrónica, por tanto, es sencillamente, un conjunto de caracteres que se añade al mensaje que enviamos a través de internet, con el objeto de proteger la integridad de los datos que se transmiten evitando que sean interceptados y falsificados. A través de esta codificación, el receptor del mensaje puede comprobar no sólo el origen de los datos que se han remitido, sino su integridad y la identidad de la persona que los envió. Así, la firma electrónica protege la confidencialidad y la seguridad de la información tanto enviada como remitida a través de internet. Igualmente es un mecanismo que permite asegurar la integridad de los documentos enviados impidiendo su modificación o manipulación.

Finalmente, la firma electrónica evita que la información transmitida sea rechazada, es decir, quien emitió la información transmitida no puede negar haberla remitido. Así se puede acreditar que se realizaron gestiones tales como contratos, operaciones bancarias, etc. que nunca emplearon como soporte un pliego de papel.

Respecto a los tipos de firma electrónica, podríamos distinguir entre la firma electrónica ordinaria que, es la que hemos descrito en estas líneas y la avanzada que se distingue de la anterior que es creada por un dispositivo seguro de creación de firma, basada en un certificado reconocido.

¿Es segura la firma electrónica?
Para responder a esta pregunta basta indicar que la seguridad de la firma electrónica se garantiza por medio de un complejo sistema de criptografía: por medio de algoritmos matemáticos se generan una serie de claves que se proporcionan a los usuarios. Así, por un un lado, el emisor dispone de una clave para enviar cifrada su información, y, por el otro, el receptor, dispone de otra clave para poder descifrar la información enviada.

Ambos tipos de firma, tienen plenos efectos jurídicos.

Los certificados digitales
Son emitidos por las llamadas Autoridades de Certificación y se les podría definir como aquellos archivos o documentos que vinculan a un sujeto, a la persona que firma el certificado, con una clave pública a su vez vinculada con una clave privada.

La existencia de estos certificados es lo que precisamente garantiza la identidad, la integridad, la confidencialidad y la garantía del envío o el no repudio de la firma electrónica.