Qué es el desahucio por precario

El desahucio es un procedimiento judicial a través del cual la persona que tiene derecho a poseer un inmueble pretende recuperarlo. Existen varios motivos por los que se puede desahuciar pero el desahucio por precario se da cuando la persona que tiene la posesión del inmueble es requerido por el propietario a dejar de vivir en él. Un ejemplo claro de desahucio por precario es el típico caso del fenómeno “okupa”, la persona que posee el inmueble no dispone de ningún título que le legitime a permanecer en el inmueble cuando el propietario le pide que se vaya. Sin embargo, existen casos en los que existe consentimiento previo del dueño en la ocupación del inmueble (precario puro).

Ahora bien, que podemos hacer si nos encontramos en la posición del propietario del inmueble? Pues bien, hay la posibilidad de interponer directamente una demanda sin necesidad de requerir al ocupante previamente, sin embargo recomendamos comunicar al ocupante por ejemplo con un burofax ya que en la mayoría de los casos es efectivo. Y además, será menos costoso.

En el caso de que no sea exitosa la vía del requerimiento previo, la interposición de un procedimiento de desahucio por precario conllevará la contratación de un abogado, un procurador, un poder notarial para pleitos, en la mayoría de los casos deberemos contratar también a un cerrajero para poder acceder al inmueble y finalmente deberán abonarse las correspondientes tasas judiciales.

El proceso de desahucio suele durar aproximadamente un año ya que hay casos en los que todo y obtener sentencia favorable y se ordene el desalojo, el ocupante no lo haga y entonces deberá interponerse una segunda demanda, esta vez una demanda ejecutiva. Una vez interpuesta, se procede al lanzamiento, que consiste en recuperación del inmueble de manera voluntaria o forzosa.