Productos defectuosos

Guía publicada por:

Breve guía de lo que se considera como producto defectuoso según la legislación española. Si se ve dañado por un producto defectuoso podrá reclamar ser compensado por el daño.

Reclamaciones de Consumidores por productos defectuosos

Un producto se considera defectuoso como aquel que no ofrezca la seguridad que legítimamente cabría esperar, teniendo en cuenta las circunstancias de uso razonable del mismo.

Hay tres cosas fundamentales que debe tener un producto para valorar su seguridad:

  1. La presentación del producto.
  2. El uso que razonablemente se puede esperar del producto.
  3. El momento en el que el producto se puso en circulación.

Además de lo anterior, hay una presunción que dispone que en todo caso un producto es defectuoso si no ofrece la seguridad normalmente ofrecida por los demás ejemplares de la misma serie. Esto último es así porque no puede exigirse la misma perfección en productos que a lo largo de los años sean objeto de mejoras.

La moderna jurisprudencia trae del derecho americano un concepto que se llama el risk-utility test, que traducido al lenguaje sencillo,  es que un producto puede ser defectuoso en cuanto a su diseño, incluso si satisface las expectativas del consumidor normal, si se puede determinar que el diseño encierra un riesgo de peligro excesivo y evitable.

Los defectos de productos pueden ser de diseño, bien por una mala elección de materiales que entrañen peligro o riesgo para el consumidor, bien porque por razón de su diseño puedan llevar a error en su manejo y que eso produzca perjuicios al consumidor, bien porque por el propio diseño del producto se induzca a errores en el mantenimiento del producto (por ejemplo en automóviles) y por ultimo errores en el diseño de la seguridad pasiva (típico de vehículos que en caso de golpes el airbag no salta).

También existen defectos de fabricación, que es cuando un producto que hemos comprado no responde a la seguridad normalmente ofrecida por otro de la misma serie, es decir que no responde a la seguridad normal de esos productos del mismo fabricante.

Por ultimo hablaré de los defectos de comercialización o falta de información de las características del producto como defecto. Es en aquellos casos en que la publicidad del producto no se ajusta a la realidad o en que los manuales de uso no informan de los riesgos potenciales del producto.

La responsabilidad del producto defectuoso recae sobre el fabricante, el importador y el vendedor. Es una responsabilidad encadenada y solidaria.

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