¿Se puede vender una vivienda compartida?

Las viviendas, los inmuebles en general (pisos, parkings, terrenos, etc.) y, en definitiva, todo aquello que el derecho considera bienes que no se pueden dividir están también sujetos a una regla básica de nuestro ordenamiento jurídico: "ningún copropietario estará obligado a permanecer en la comunidad. Cada uno de ellos podrá pedir, en cualquier momento, que se divida la cosa común."

Desafortunadamente, hay determinados bienes que por su condición son indivisibles. Un piso, una casa, un coche no se pueden dividir en dos partes iguales y que mantengan su utilidad. En muchos casos, cuando se produce la indivisibilidad física o cuando la divisibilidad lo único que supone es una auténtica pérdida de valor, el camino que la legislación vigente ofrece es la llamada división de la cosa común.

Al proceso judicial de la división de la cosa común, el copropietario que desea vender consigue que la autoridad judicial supla la voluntad de aquel que no quiere vender. Se insta un proceso judicial por el que se venderá el bien indivisible y cada copropietario, de acuerdo con su cuota de propiedad, obtendrá el resultado que corresponda.

Desgraciadamente, el proceso judicial no deja de ser un proceso que todavía mantiene algunos tics anacrónicos. La venta que se plantea al final del proceso es a través de un sistema de subasta; un sistema que, aunque el precio de salida está fijado por un perito judicial, no es ninguna garantía de obtener el mejor resultado económico.

Pero es cierto que se trata de un proceso con este inconveniente y que tiene sus costos, también es cierto que, por una parte, ésta es la única vía para, con un cien por cien de acierto, garantizar que se procederá a la venta y liquidación económica del piso; y, por otro, también, la única vía que, ante la amenaza de una venta a subasta y en la que se ponga en peligro el resultado, el copropietario menos colaborador puede llegar a entender la necesidad de negociar y encontrar una salida amistosa a la situación de bloqueo.