Si me separo ¿qué pasa con mi hijo que todavía no ha nacido?

Vaya por delante que la jurisprudencia al respecto es escasa y contradictoria.

Por un lado hay sentencias que estiman conveniente aprobar un Convenio Regulador en el que se establezca un régimen de visitas y una pensión de alimentos a favor de un hijo concebido pero no nacido, todo condicionado al posterior nacimiento.

Por otro lado, otras sentencias no llegan a la misma conclusión y deniegan este derecho al considerar que tanto régimen de visitas como pensión de alimentos deben ser acordados cuando nazca el hijo porque sus necesidades no pueden ser conocidas hasta dicho momento.

Otra cuestión son los gastos generados por la situación de embarazo de la mujer, ¿cómo se pagan?. De nuevo hay posturas contradictorias y para unos dichos gastos no son exigibles pues no cabe una pensión de alimentos mientras no nazca el hijo, mientras que para otros tales gastos deben ser soportados por ambos futuros padres y cabría fijar alimentos a favor del hijo no nacido.

Como conclusión: en caso de separación o divorcio, no sólo conviene regular el régimen de estancias del niño que va a nacer, sino que, también se debe fijar la pensión de alimentos para su sostenimiento, por ser cuestiones beneficiosas para ese hijo que está por nacer.

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