Después de la denegación de la protección internacional: Explora tu camino hacia una nueva oportunidad en España
En el complejo y cambiante panorama de la migración, muchas personas se enfrentan a la difícil realidad de la denegación de su solicitud de protección internacional. Este revés puede generar desesperanza y frustración, pero es importante recordar que no todas las puertas están cerradas. Es crucial concienciar a quienes se encuentran en esta situación de que existen otras opciones para regularizar su situación migratoria en el país de acogida. En este artículo, exploraremos las alternativas disponibles y destacaremos las oportunidades que aún pueden surgir después de la denegación de la protección internacional. Descubre cómo abrir nuevas puertas hacia una vida más segura y estable en un nuevo hogar.
A continuación, te proporcionaré información sobre las opciones existentes:
1. Recurso de reposición: cuando se deniega una solicitud de protección internacional, es posible
presentar un recurso de reposición ante la misma autoridad que emitió la decisión. Este recurso
busca impugnar la denegación y proporcionar argumentos adicionales para respaldar la
solicitud. El plazo para presentar el recurso suele ser de un mes a partir de la notificación de la
denegación (ideal para aquellas que no han cotizado el tiempo suficiente en la seguridad social
para optar a un arraigo laboral)
2. Recurso contencioso-administrativo: si el recurso de reposición es denegado o si se prefiere
una vía judicial, se puede interponer un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal
Superior de Justicia correspondiente. Este recurso permite a un juez revisar la legalidad de la
decisión administrativa de denegación de la protección internacional.
3. Arraigo laboral: es una opción para aquellos que han residido de forma continuada en España
durante un periodo de tiempo determinando (en este caso, dos años) y pueden demostrar una
relación laboral estable. Para solicitar dicho trámite, es necesario presentar documentación que
respalde la residencia continuada y la relación laboral, como contratos de trabajo, nómina, vida
laboral y otros documentos relevantes.
4. Arraigo social: es otra alternativa que permite regularizar la situación migratoria en España. En
este caso, se requiere demostrar una residencia continuada en el país durante un periodo de
tiempo determinado (generalmente, tres años) y acreditar vínculos sociales y familiar con España.
Esto implica contar con informes de integración, una empresa dispuesta a respaldar tu
solicitud, entre otros documentos.
5. Matrimonio o pareja de hecho con ciudadano de la Unión Europea o residente legal en
España: si una persona cuya solicitud de protección internacional ha sido denegada y mantiene
una relación de pareja de hecho, está casada con un miembro de nacionalidad europea o con
residencia legal, puede existir la posibilidad de solicitar un régimen de reagrupación familiar o
familiar comunitario, según el caso. Esto implica demostrar el vínculo matrimonial o de pareja
de hecho válido y contar con la documentación requerida.
Recuerda que cada caso es único y puede haber circunstancias específicas que afecten las opciones
y los requisitos para regularizar la situación migratoria en España. Por lo tanto, es fundamental buscar
asesoramiento legal especializado.