El Despido Improcedente

Guía publicada por:

¿Es o no, un tipo de despido?

El despido es la decisión unilateral de la empresa de extinguir la relación laboral de manera unilateral, ya sea en un contrato temporal o en un contrato indefinido.

Desde el punto de vista empresarial, dos son los despidos individuales que se pueden realizar, tal y como ya hemos mencionado en las guías legales anteriores:

  1. Despido objetivo.- Despido realizado principalmente por unas causas técnicas, económicas, organizativas o de producción. Este tipo de despido otorga al trabajador una indemnización de 20 días por año trabajado siendo necesario un preaviso de 15 días.
  2. Despido disciplinario.- Despido realizado por un comportamiento grave y culpable del trabajador que hace que no tenga derecho a indemnización ni sea necesario el preaviso.

Por lo tanto, en principio, el despido improcedente no es ninguno de ellos. La improcedencia no es un tipo de despido sino que, es la forma en que se puede calificar un despido efectuado, ya sea objetivo o disciplinario.

Podemos definir el despido improcedente como aquella extinción de la relación laboral efectuada por la empresa que no es correcta, ya sea por que no ha seguido el procedimiento para ello o no tiene causa para realizar alguno de los dos despidos indicados anteriormente.

Una vez que el juzgado dice que, una extinción laboral es improcedente, la empresa tiene la decisión de optar entre la readmisión del trabajador a su puesto de trabajo, o bien, abonarle una indemnización, sin que la persona trabajadora pueda elegir, a excepción de los representantes legales de los trabajadores.

La empresa puede, reconocer la improcedencia del despido sin esperar a que lo diga un juez, tanto en el acto de conciliación laboral en el SMAC o en los juzgados, antes del juicio.

La indemnización, a la que tiene derecho un trabajador, si se considera el despido como improcedente, será de 33 días por año trabajado, con un tope máximo de 24 mensualidades, y si consta de una antigüedad laboral anterior a febrero de 2012, la indemnizacion será de 45 días por año trabajado, con un tope de 42 mensualidades.  

En cualquier caso, al margen de la indemnización, todo trabajador, tiene derecho al finiquito, esto es, a las cantidades ya generadas por su trabajo pero no abonadas por la empresa, como son la parte proporcional de vacaciones y pagas extraordinarias.

Además, para impugnar el despido, se dispone de un plazo máximo de 20 días hábiles

No obstante, en determinadas ocasiones la empresa conocedora de que no tiene ninguna causa para despedir a un trabajador, reconoce la improcedencia del despido en la carta de despido. Hay que aclarar que, no es del todo correcto que la empresa reconozca la improcedencia, en la carta de despido, ya que de esa manera la indemnización tributaría. En lugar de este reconocimiento en la carta de despido, lo que debería hacer la empresa es, que, tras entregar una carta de despido disciplinario al trabajador, le comunica verbalmente que le reconocerá la improcedencia en el acto de conciliación, y de esta manera, la indemnización no tributa.

La improcedencia del despido no obliga al preaviso de 15 días, sino que dependerá de qué despido, haya realizado la empresa. Si hablamos de un despido objetivo que se convierte en improcedente, será necesario el preaviso de 15 días. Sin embargo, si se realiza un despido disciplinario y posteriormente se reconoce la improcedencia en el acto de conciliación, o es determinada por un juez, no es necesario el preaviso.

Si la empresa quiere reconocerte la improcedencia, lo mejor es que te la reconozca en el acto de conciliación para que la indemnización que te corresponde esté exenta de tributación, siempre que no supere los 180.000 €.

Si el juez, reconoce como improcedente el despido, la empresa tiene la opción de reincorporar al trabajador a su puesto de trabajo, tal y como hemos comentado con anterioridad, y en dicho caso, el trabajador tendrá la obligación de hacerlo, además de verse obligado a devolver a la empresa, la indemnización por despido objetivo que hubiera percibido.

Pedir más información sin compromiso