La Mediación en el ámbito de la empresa.

La Mediación Empresarial se configura como una herramienta al servicio de las empresas que posibilita la resolución de los conflictos surgidos, tanto dentro de la propia estructura organizativa como aquellos surgidos de relaciones con terceros.

Gracias a la utilización de los servicios de la Mediación, se puede conseguir salvaguardar tanto las relaciones comerciales como la calidad de las relaciones de los trabajadores, de manera que pueda obtenerse una mejor y mayor productividad.

ÁMBITOS DE APLICACIÓN

1. Mediación Laboral: En el día a día de la empresa, y en su ámbito interno, pueden surgir conflictos derivados de la aplicación de las políticas de Recursos Humanos, conflictos entre compañeros de trabajo provocados por la convivencia laboral, incluso conflictos colectivos que pueden surgir ante políticas de ajustes salariales o modificación de condiciones de trabajo.

La mediación en éste ámbito puede abordarse desde dos perspectivas:

a) Mediación asistida por mediadores ajenos a la empresa: Se trata de actuaciones puntuales del equipo de mediadores externo a la empresa que intervienen una vez generado el conflicto.

b) Mediación asistida por trabajadores-mediadores de la propia empresa: Modelo preventivo cuya finalidad es formar a un equipo de trabajadores de la propia empresa como mediadores, de forma que adquieran las habilidades necesarias para gestionar, de forma imparcial y confidencial, los conflictos que se produzcan entre sus compañeros de trabajo.

2. Mediación Empresarial: Conflictos generados de la relación empresa-accionistas,  cliente-proveedor, los conflictos en materia de propiedad industrial y/o intelectual, conflictos de competencia, incluso la responsabilidad frente al cliente en materia de consumo, son conflictos susceptibles de ser gestionados a través de la Mediación, muchas veces con al ánimo de no romper esas relaciones comerciales.

Principales Ventajas de la Mediación frente a otros sistemas de resolución de conflictos: 

1. Económicas: Es menos costosa que otros procedimientos (judicial y el arbitraje).

2. Rapidez: El procedimiento suele durar pocas semanas, a veces incluso días.

3. Comunicación: Ayuda a rehabilitar la comunicación y confianza entre las partes.

4. Acuerdos duraderos: La solución ha sido elaborada, acordada y asumida por las partes, obteniendo así una satisfacción frente a sus pretensiones; por lo tanto hay mayor implicación y convencimiento en el cumplimiento de los mismos.

5. Imagen corporativa: Se salvaguarda la imagen de la empresa gracias a la confidencialidad del proceso.

La mediación, además, se configura como una herramienta muy útil en conflictos surgidos en la empresa familiar, donde los conflictos pueden llegar a afectar a las relaciones personales entre miembros de la misma familia, por ejemplo en conflictos derivados de la sucesión de empresa, siendo muy recomendable y, cada vez más habitual, la introducción del uso de la Mediación en los Protocolos Familiares para aquellas discrepancias que pudieran surgir en el seno de la familia empresaria.